Ofrecer una respuesta educativa más concreta al intensificar la intervención tanto de manera individual como en pequeño grupo.
Disminuir y/o suprimir conductas inadaptadas que presenten los alumnos.
Desarrollar y fortalecer patrones de conducta adaptada.
Analizar actuaciones que propicien la creación de una propuesta de intervención didáctica que tengan aplicación al aula ordinaria.
Desarrollar y llevar a cabo estrategias metodológicas para modificar la conducta del alumno.
Aumentar la implicación y la colaboración de la familia en el proceso de intervención.
Adquirir estrategias de autocontrol conductual.
Desarrollar habilidades socioemocionales y de reconocimiento de emociones en sí mismo y en los demás.
Adquirir un repertorio conductual ajustado al contexto.
Aumentar la tolerancia a la frustración.
Desarrollar habilidades de empatía.
Mejorar la actitud de los alumnos hacia el contexto escolar.
Proporcionar estrategias para controlar reacciones impulsivas
Disminuir la reactividad ante situaciones de interacción social.
Manejar de forma adecuada la demora de gratificaciones y la gestión del enfado.